Opinión 52 : Como convertir el templo en una cueva de ladrones

Soy un hombre reservado en ciertos aspectos de mi vida , por ejemplo en lo tocante a la espiritualidad opino que cada uno debe creer lo que considere oportuno respetando a los demás y no me gusta ir pregonando mi fe a los cuatro vientos, como en otros asuntos es cosa mía.

El caso es que hoy, en una de mis visitas a la capital, me dejé caer por el casco viejo y como quien no quiere la cosa decidí hacer una visita a la augusta Iglesia catedralicia de mi bien amada  Vetusta como diría el eterno Clarín. Imaginad la magnitud de mi sorpresa cuando una vez franqueada la entrada del templo, me detiene un biombo de metacrilato al más puro estilo "Yelmo cines" que me conduce inexorablemente a una ventanilla en la que se debe pagar la entrada. Sencillamente indignante que se capitalicen las iglesias de esta manera, no se me malinterprete, está bien en el caso de visitar la Cámara Santa ya que es algo de interés histórico y ese dinero puede destinarse a futuras restauraciones de la misma pero lo que me indigna es que se intente sacar tajada a las visitas del templo de forma tan flagrante puesto que fuera del inevitable interés arquitectónico del edificio, a la Catedral se va a rezar y ningún hombre de bien debería verse obligado a pagar por hacerlo. Está bien que los monumentos se aprovechen del turismo, es casi  obligatorio pero hay ciertas cosas que deben respetarse en esta vida y las Iglesias independientemente de las creencias de cada uno, son una de ellas. Como caballero asturiano bien nacido y orgulloso de mi condición de " ovetense adoptivo" me duele profundamente ver que uno de los grandes símbolos de Oviedo, ciudad con solera donde las haya, se está convirtiendo en una barraca de feria. ¿ Qué será lo próximo, expendedores de crucifijos?

Ruego me disculpéis lo exaltado de mi prosa hoy pero estoy indignado aunque dejando la cólera a parte no es motivo para perder las formas. Desde aquí pido encarecidamente que si alguien con influencias lee esto y está de acuerdo, tome las medidas oportunas para reparar lo que a mi entender es una ofensa contra los asturianos y los ovetenses en particular, sin más me despido esperando que haya sido de vuestro agrado, hasta más ver

Atentamente

El Escriba